6 de cada 10 colombianos no tiene dinero ahorrado para responder ante una eventualidad que implique un gasto equivalente a su salario mensual, según afirma un estudio realizado por la CAF. Por ende, una enfermedad, un accidente o el fallecimiento de un familiar puede derivar en problemas económicos para el hogar que afecten la calidad de vida de sus integrantes.
Datos como este denotan la importancia de tener una población educada financieramente. De hecho, estudios de la OCDE han concluido que existe una relación directa entre educación financiera y desarrollo económico, pues, cuando una persona tiene conocimientos básicos en esta materia, es más probable que tome decisiones que le permitan gozar de una buena salud financiera y así, alcanzar sus metas.
Para avanzar hacia un país y una región con personas educadas financieramente, se deben articular esfuerzos entre el Gobierno, las instituciones educativas, entidades financieras y, por supuesto, los hogares del país. La educación empieza desde casa y por eso es importante que los padres, a través del ejemplo y actividades didácticas, inculquen buenos hábitos en sus hijos.
Prácticas como el ahorro deben ser cultivadas desde la primera infancia. Para esto, no se necesita implementar metodologías complejas. Por ejemplo, cuando los padres les dan una pequeña mesada a sus hijos y los invitan a que guarden parte del dinero para comprar el videojuego que desean, están enseñándoles a ahorrar para alcanzar las metas.
Aunque usted no lo crea, las nuevas generaciones, también llamadas generación Z y Alfa, son niños y jóvenes que reciben dinero de padres o familiares, gastan recursos y realizan compras en diferentes comercios. Siendo la ropa, los dulces y el entretenimiento (videojuegos, cine, entre otros), los productos que más consumen.
Hoy en día, las generaciones Z y Alfa tienen cierto poder adquisitivo, lo que hace necesario fomentar en ellas la educación financiera desde temprana edad. Una ventaja de los jóvenes es la facilidad a las nuevas tecnologías, una herramienta que contribuye a que aprendan mejor por medio de actividades lúdicas.
Ante este panorama, las fintech y las tecnologías educativas o edtech, han venido jugando un papel muy importante alrededor del mundo. En Colombia, a finales de este año, saldrá la primera fintech enfocada 100% en el segmento de la generación Z.
FinZi es una fintech, apalanca en un banco colombiano, con un componente educativo, que tiene como propósito empoderar a la generación Z del país para que empiecen a adentrarse en el mundo financiero y, a través de productos diseñados para ellos, aprendan a darle un manejo adecuado a su dinero por medio de juegos y actividades interactivas.
Esta es una iniciativa que proviene del sector privado y que tiene el potencial para contribuir con el reto de educar financieramente a los más jóvenes.
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